Si se pueden reparar, toda transmisión automática es reparable, lo que varía de una reparación a otra es el precio, lo cual depende mucho el mantenimiento que se le haya brindado al vehículo o cuánto tiempo se ha manejado con la falla, perjudicando la transmisión. En escasos casos la transmisión se deteriora a tal punto que no es rentable repararla, pero la idea de que son desechables es solo un mito.

Nuestra recomendación es repararla, puede ser más caro que cambiarla por una usada, pero a futuro es lo más rentable; esto debido a que las cajas gozan de una vida útil como todas las partes del vehículo, entonces si usted busca una caja automática usada en el mejor de los casos puede tener solamente media vida útil o la vida útil estaría pronta a cumplirse.

Existen dos formas:

El número uno si el vehículo esta frio se arranca y se mide estando en parking. La marca tiene que estar en COLD.

La segunda es si el vehículo está caliente la marca que se usa como referencia es HOT.

Nunca se mide el aceite estando el auto con el motor apagado.

Nota: Hay vehículos que se requiere llevarlo al taller para verificar el estado y la cantidad del aceite, ya que necesita de herramientas específicas para verificarlo ya que el vehículo no cuenta con una varilla de medición.

En nuestro taller tardamos de tres días a una semana reparando una caja automática. Damos 6 meses de garantía por escrito.

Falso, el vehículo automático es inteligente, hace los cambios en el momento que los requiere, ya sea si ocupa una marcha más fuerte o una más débil. Además, la transmisión está diseñada para ir a mayores revoluciones que el motor. Puede darse un mayor consumo de combustible irregular cuando la transmisión sufre de algún desperfecto, de lo contrario no tiene por qué consumir más combustible.

No es cierto, si le ponemos un poco de atención notaremos que casi todos los equipos de trabajo pesado son automáticos, como, por ejemplo: las grandes grúas que aparcan aviones, los montacargas que en muchas empresas trabajan las 24 horas a tres turnos, las vagonetas que trabajan en los tajos, las unidades de bomberos y muchas flotillas de camiones de las grandes compañías de este país y del mundo son automáticos.

Esto lo que significa realmente, es que las transmisiones automáticas son por lo general de muy buena calidad y de gran rendimiento. Es necesario aclarar que, como todo, la calidad del producto depende también de la marca y el diseño de la transmisión.

El desconocimiento en la reparación de las cajas automáticas por muchos mecánicos ha conllevado a muchos mitos y prejuicios con respeto a dichas transmisiones. La mayoría de los mecánicos les recomiendan a sus clientes que no compren vehículos automáticos. En otros casos si la caja automática falla, le recomiendan que la cambien por una manual.  Esto se debe a que es una tecnología muy nueva para nuestro país y por tal circunstancia no le hemos depositado la confianza necesaria a dicha tecnología.

Aproximadamente cada 40000 Km cambio de aceite y filtro realizado en nuestras instalaciones.

En el 90% de los casos cambiar el aceite de la caja solo empeora el daño, la reparación es lo único que corrige la falla. Debe recordar que el cambio de aceite es un mantenimiento preventivo, para que este se realice se necesita que el vehículo y la caja funcionen correctamente.

El buen funcionamiento de su transmisión depende en gran medida del estado de su lubricante. En esta sección le proporcionamos una guía general para interpretar el estado del aceite de transmisión automática y que le dará la pauta para comunicarse con nosotros y con gusto le serviremos.

• Nuevo: Un fluído limpio debe ser translúcido y presentarse libre de residuos y partículas contaminantes.
• Normal: El fluído en condiciones aceptables muestra cierto oscurecimiento, barniz y una mínima presencia de polvo metálico.
• Rosado: Si el fluído aparece rosado o lechoso, significa que se ha introducido agua o anticongelante del ciruito de enfriamiento por algún retén.
• Quemado: Si el fluído es demasiado oscuro u opaco y tiene olor a quemado, probablemente existe desgaste excesivo o daño en los componentes de fricción.
• Partículas de Metal: La presencia excesiva de residuos metálicos es evidencia de daño grave en componentes internos de la unidad.
• Partículas de Aluminio: Encontrar partes de aluminio son evidencia de daño severo en algunos conjuntos internos de la unidad.

Se conecta una herramienta llamada escáner, la cual ingresa a las computadoras con las que cuenta el vehículo para poder leer la memoria de fallas almacenadas o códigos de falla.
El escáner puede leer la información de los sensores de la transmisión y motor, por lo que se puede evaluar su comportamiento y comparándolos con el manual, saber si está fallando o no.
En Cajas Automáticas Zanese contamos con escáners actualizados para poder diagnosticar todos los vehículos.

Es una parte interna de la transmisión automática la cual se encarga de controlar la presión de los cambios.

Antes de las transmisiones automáticas eléctricas, la caja de válvulas recibían información de las condiciones de manejo del motor por medio del cable de sobrepaso o de una manguera de vacío para que las válvulas se movieran para hacer los cambios a tiempo y variar la presión del aceite de transmisión automática, además de recibir la información de la velocidad del vehículo por medio de la válvula de gobernador, la cual es movida por la fuerza centrífuga.

Las transmisiones eléctricas son controladas por la computadora del vehículo, la cual recibe información de los sensores de motor y transmisión y ordena el cambio de acuerdo a los parámetros que tiene programados. En la caja de válvulas tienen incorporadas válvulas solenoides, las cuales son activadas por la computadora para mover otras válvulas que controlan la presión para que entren los cambios, de esta manera una señal eléctrica se convierte en una señal hidráulica. En ambos casos, la caja de válvulas sufre desgaste (el cual se debe en gran medida a la falta de mantenimiento), por lo que deben ser reemplazadas o reparadas si es necesario.

Las transmisiones automáticas deben de trabajar en un rango de temperatura de entre 70 a 100 grados Celsius. Esto se logra cuando se le hacen los mantenimientos oportunamente y no existen obstrucciones en el enfriador de aceite de la transmisión.

Pero cuando no se hacen los mantenimientos, el aceite va perdiendo su capacidad de enfriamiento, además de que los residuos de desgaste que genera la transmisión empiezan a obstruir el enfriador.

Esto genera un efecto dañino que va creciendo lentamente con el tiempo y que, finalmente, ocasiona problemas como que la transmisión se neutralice, que se quede en un solo cambio, que ya no se mueva, que tire el aceite por la alta presión del aceite, o que se salgan los retenes, entre otros.

Estos problemas terminan en reparaciones más costosas que lo que hubiera salido un cambio de aceite de transmisión automática.

En tiempos ya anticuados en la tecnología, lo mínimo que se veía era ‘Drive’ y ‘Low’, dos cambios, luego aparecen las cajas con tres cambios, por consiguiente, figuran D, 2 y Low y, más adelante, D, 3 ,2 y Low cuando tienen cuatro cambios. Hoy con cinco y hasta nueve cambios adelante, la indicación es digital en el tablero y las marchas se seleccionan escalonadamente a mano, desde el timón o en la palanca tradicional.

Todas las cajas automáticas, desde la primera hasta la más moderna, son secuenciales, lo cual quiere decir que los cambios suben o bajan ordenadamente y en secuencia. No se puede, por ejemplo, pasar de quinta a segunda en una sola operación, como en la manual. La caja automática recorre, así sea brevemente, toda la cascada de piñones. Luego no es nada novedoso lo que anuncian como “secuencial”.

Es la recomendación y la tendencia de la tecnología. Cajas con mínimo seis marchas adelante y la opción de manejo ‘manual’. Hoy, los fabricantes quieren muchas relaciones para que el motor siempre esté girando en su mejor momento de torque, tenga la mejor respuesta y así se ahorre combustible de manera importante. Pero es claro que una caja de siete u ocho o más hacia adelante es inmanejable a mano pues uno tendría que estar siempre haciendo cambios.

Son muchas y diversas las fallas que puede tener su vehículo a causa de la transmisión, pero las más frecuentes son:

1. Se va el motor en vueltas (se neutraliza al querer entrar un cambio).
2. Sale el vehículo muy pesado porque sale en cambio alto.
3. Se tardan mucho los cambios y se oye el motor muy forzado.
4. Cambios bruscos o arrastrados (que pierden firmeza).
5. Manchas de aceite rojo en el piso.
6. Se sobrecalienta el aceite de transmisión.
7. Golpea al entrar un cambio o al bajar los cambios (frenar).
8. Echa mucho humo blanco el vehículo. 
9. Al poner la palanca en cambio se apaga el motor.
10. Se escuchan zumbidos en la transmisión. etc.

Los precios varían mucho, depende de que transmisión tenga su automóvil, también depende del daño que tenga su transmisión. Para hacer una cotización aproximada es necesario realizar pruebas para diagnosticar la transmisión, y así determinar daños y costos.

El diagnóstico significa determinar si la falla que trae su vehículo es de transmisión o de otra parte de su unidad y es gratis. Si se determina que la falla es de transmisión y usted necesita especificar qué falla tiene la transmisión y cuánto cuesta su reparación, se requiere hacer un estudio específico y una serie de pruebas, que también es gratis.

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